Muchas embarazadas pueden presumir de su melena sedosa y voluminosa. Esto ocurre porque durante el embarazo el incremento de los niveles de hormonas, incluyendo estrógeno, causa un aumento en la cantidad de cabello en fase de crecimiento. Durante el embarazo se pierde mucho menos cabello que antes.
Esto contrasta drásticamente con lo que ocurre después de dar a luz, donde muchas nuevas mamás se quejan de una caída larga y lenta de cabello. Normalmente la caída empieza a partir del segundo o tercer mes posparto y puede convertirse crónica durante varios meses. ¿Porqué pasa esto? Porque tras el parto las hormonas vuelven a reequilibrarse y todo ese cabello que estaba detenido en la fase de crecimiento durante el embarazo continua su ciclo normal de vida y se cae.
¡La caída de cabello posparto es un proceso 100% normal! No te debes preocupar, pero sí debes tomar medidas para proteger y fortalecer tu cabello. Todo comienza con tu alimentación, primero porque es crucial para tu salud y la de tu bebé que te nutras de comida sana, y segundo porque el bulbo capilar se nutre a través del torrente sanguíneo de las vitaminas y minerales que consumes.
Enfócate en alimentos altos en Vitamina B como el pollo, aguacate, pescado y avena. Algunos de los minerales importantes para proteger tu cabello son el hierro, zinc, calcio y yodo. Estos se consiguen en el maní, la calabaza, los garbanzos, las espinacas y la carne. Otros alimentos importantes para cuidar tu cabello son los que contengan flavinoides. Algunos ejemplos son manzanas, naranjas, ciruelas, espinacas o fresas.
Es importante que evites tratamientos capilares agresivos durante la fase de mayor caída. Usa champú suave, con PH neutro, sin parabenos. Evita el uso excesivo de planchas y secadores o cualquier otro instrumento de calor que pueda quemar el cabello. Usa acondicionadores naturales con biotina y sílice. Hazte mascarillas de aceites (de almendra, de oliva o de romero) y masajes del cuero cabelludo para aumentar la irrigación. Estas mascarillas las puedes usar también durante el embarazo.
Otras ideas de mascarillas naturales que te puedes hacer en casa son:
1. Aloe Vera. Cortas un pedazo de la planta de manera horizontal (ver foto) y te frotas el cristal en la raíz de todo el cabello. Esperas a que se seque y te enjuagas con abundante el agua.
2.Clara de huevo. Bate cuatro claras de huevo y frótalas en el cuero cabelludo con movimientos circulares. déjalo penetrando durante media hora y lávate el cabello como de costumbre. La albúmina del huevo actúa para fortalecer los folículos y las hebras débiles.
3. Pasta de col verde. Pones en remojo durante al menos una hora col verde crudo cortado con un poco de agua. Luego bates la mezcla para producir una especie de crema que te aplicarás por todo el cuero cabelludo. Dejas que la crema penetre durante media hora y lavas como de costumbre.
Habitualmente el cabello se cae a un ritmo de 50 a 100 por día. Durante el embarazo perdemos menos y posparto perdemos más. Es parte de los cambios normales de la maternidad. Y no le prestes atención a los mitos falsos como el que la lactancia materna es la causa de la caída de cabello. Son dos procesos completamente distintos. Una mamá que no lacta también sufrirá de caída de cabello.
Pon en práctica los consejos que te he compartido, tanto durante tu embarazo como después. Cuidar nuestro cabello para mantenerlo sano y fuerte es una costumbre que debemos adoptar de por vida. ¡Nuestro cabello también merece nuestro cariño!