Escoger el nombre perfecto para tu bebé es una tarea que te puede ilusionar y a la vez asustar. No quieres equivocarte porque el nombre que le pones a tu bebé formará parte de su identidad el resto de su vida. Una encuesta británica hecha por Mumsnet.com encontró que el 20% de los sondeados se arrepentían del nombre que le pusieron a su bebé. De esos, el 25% dijo que se arrepentían porque el nombre resultó siendo muy común. Por eso es importante tomarte tu tiempo antes de la decisión final. Aquí te comparto algunas ideas que te pueden ayudar al momento de elegir ese nombre soñado para tu pequeñín.
No sigas las modas. Todos hemos visto como ciertos nombres cogen notoriedad y se ponen de moda, pero eso nunca dura. Igual de rápido que llegaron a ser “cool”, desaparecen. Es un poco frustrante cuando tu bebé, que lleva un nombre muy de moda, empieza el colegio y tiene el mismo nombre que 5 de sus compañeros.
Piensa en el contexto cultural de donde planeas criar a tus hijos. Un nombre difícil de pronunciar en el idioma local tendrá repercusiones para tu pequeño cuando empiece el colegio. Aunque tu bebé es único en el planeta, seguramente deseas que se integre bien con sus compañeros de escuela. El que puedan pronunciar su nombre forma parte de esa integración. Por ejemplo, un nombre como Covadonga o Chiquinquirá pueden ser nombres bonitos en países hispanoparlantes, pero van a ser más difícil de pronunciar en países donde el idioma oficial es diferente.
Hazle homenaje a tus ancestros. A lo mejor tienes algún bisabuelo o tatarabuela que tuvo una influencia positiva en la familia o en tu vida personal. Sería entonces un gran honor que tu hijo o hija lleve su nombre y a la vez su legado.
Puedes esperar hasta verlo o verla para tomar la decisión final. Puede pasar que el nombre con el que estuviste muy ilusionada todo el embarazo no “va” con tu bebé una vez que lo tienes en tus brazos. Es buena idea tener dos o tres nombres posibles escogidos de antemano por si tu preferido no le pega puedas tener otras opciones a mano.
Debes tomar en consideración el diminutivo o hipocorístico. A mucha gente le gusta abreviar los nombres (hipocorístico) o usar diminutivos en vez de llamar a los niños por su nombre completo. Debes tomar esto en cuenta al momento de decidir el nombre. Piensa que a Maximiliano, por muy bello que sea el nombre, le llamarán Max, a José María, Chema, y a Francisco, Paco.
Todo el mundo tiene una opinión. Aunque no la hayas solicitado, tu entorno va a darte su opinión. Si tu y tu pareja necesitan ayuda para escoger un nombre una idea puede ser hacer un sondeo en la familia. Haces una lista de tus 3 o 4 nombres favoritos y pones a todos a votar. ¡El nombre con más votos gana! Si prefieres no escuchar la opinión de los demás te sugiero que no compartas el nombre con nadie. La gente por bien intencionada que sea, tiende a juzgar o dar opiniones que puedan afectar tu decisión.