Cada embarazo es un mundo, pero hay ciertos cambios que vive tu cuerpo que son casi universales. Aquí te comparto algunos cambios normales que puedes experimentar durante tu embarazo y después de dar a luz.
1. Tu cabello más bello. Uno de los descubrimientos que harás durante tu embarazo es ver lo bonito que se te pone el cabello. Se cae mucho menos y brilla más que nunca. Se ve más voluminoso. Todo esto es provocado por la desaceleración del ciclo natural de crecimiento del folículo capilar debido al incremento en la hormona estrógeno. Pero no nos hagamos muchas ilusiones porque estos efectos sobre nuestro cabello son transitorios. Cuando se acaba el embarazo las hormonas responsables de los efectos positivos sobre nuestro cabello volverán a sus niveles normales y con ello el estado habitual de nuestro cabello. De hecho, unos meses después de dar a luz notarás un incremento en la caída del cabello. Eso es temporal. Debes recuperar el volumen habitual de tu cabello hacía el primer cumpleaños de tu bebé.
2. Tus uñas tienden a crecer más rápido. Este crecimiento es sutil y muchas embarazadas ni se dan cuenta. La aceleración del crecimiento de las uñas puede ser acompañada de otros efectos secundarios menos deseados como uñas más débiles o resecas. Pueden hasta tener líneas o marcas blancas. Como todos los efectos secundarios del embarazo debido a las hormonas, estos también deben pasar cuando hayas tenido a tu bebé y tus hormonas vuelvan a sus niveles pre-embarazo. Aquí algunos tips para proteger tus uñas durante el embarazo:
- Mantenlas cortas. Así evitarás que se te quiebren.
- Sécate bien las manos después de lavarlas. Uñas mojadas se debilitan y uñas débiles se rompen más fácilmente.
- Usa crema hidratante para manos todas las noches antes de dormir. Eso protegerá a tus uñas de la resequedad.
- Cuando te limes las uñas hazlo en una dirección solamente. También mantén las esquinas de tus uñas redondeadas para evitar que se enganchen en alguna tela.
3. Puedes desarrollar estrías. Las estrías son una realidad para muchas embarazadas, hasta 8 de cada 10 embarazadas pueden desarrollar estrías. Las estrías aparecen cuando la dermis (la capa media de la piel) es estirada y se rompe. Hay ciertas pieles más susceptibles a desarrollar estrías. Al finalizar el embarazo la apariencia de las estrías disminuye, pero nunca desaparecen por completo. Mantener tu piel bien hidratada desde el inicio de tu embarazo puede ayudar a disminuir la probabilidad que te salgan estrías. Usa una buena crema como la Tummy Rub Butter de Mama Mio todos los días, inclusive después de haber dado a luz. También dentro de la misma línea de Mama Mio hay la crema para minimizar la apariencia de las estrías, Mama Marks. Esta última la puedes usar varios meses después de dar a luz, hasta que tu piel vuelva a estado original.
4. Las piernas pesadas. Durante el embarazo tu cuerpo produce más sangre para apoyar el crecimiento de tu bebé. ¡El volumen sanguíneo en tu cuerpo puede aumentar de 20% a 100%! Normalmente es alrededor de 45%. Ese incremento de sangre puede poner presión en las venas de las piernas. Tienen que esforzarse mas para enviar la sangre de las piernas al corazón. La sangre se va acumulando y estirando las venas. Esto puede causar lo que llamamos venas varicosas. Nuestras piernas se pueden sentir pesadas y dolorosas, especialmente al final del día. En general desaparecen con el embarazo. Mientras tanto, para conseguir alivio, levanta las piernas durante el día para ayudar con la irrigación sanguínea. También puedes usar una crema especializada como la Lucky Legs de Mama Mio que te proporcionará alivio y frescor.
5. Los pezones agrietados. Algunas nuevas mamás que dan de pecho pueden padecer de pezones agrietados. Es una condición transitoria (y dolorosa) mientras tus pezones se acostumbran a la lactancia. La buena noticia es que hay alivio. Aquí te comparto algunas opciones:
- Tu primera línea de defensa contra los pezones agrietados es la crema lanolina. La debes comenzar a usar antes de dar a luz para ir hidratando tus pezones. La lanolina es la única crema que es completamente inofensiva para tu bebé. Puedes probar esta crema lanolina de Medela. Úsala desde la semana 37 de tu embarazo.
- Otra opción de alivio son los pads hidrogel. Los metes en el congelador y cuando sientas molestia o dolor te los pegas a los pezones. Conseguirás alivio inmediato. Úsalos todas las veces que los necesites.
- Las pezoneras son una excelente opción para ayudar a sanar los pezones agrietados. Ellas forman una barrera entre tu pezón y la boca de tu bebé para que pueda continuar el proceso de cicatrización sin arriesgar el de la lactancia. Estas pezoneras ergonómicas de Haakaa son una excelente opción.
- Cuando estés sola en casa aprovecha para dejar tus pezones destapados. Al no tener nada frotando contra ellos sentirás alivio y además dejarlos secar al aire libre promueve la cicatrización.
- Un último pero valioso consejo es mojarte los pezones con leche materna cada vez que terminas de dar de pecho. Deja que esa leche se seque al aire libre. La leche materna ayuda a cicatrizar los pezones agrietados.